PATOLOGÍAS MÁS FRECUENTES EN BAJA VISIÓN
CONSIDERACIONES GENERALES
El siguiente listado de patologías no es excluyente, es decir, aunque aquí están reflejadas las que con mayor frecuencia causan Baja Visión, puede ser posible padecerla a raíz de otras patologías que no se encuentran entre las descritas.
La Baja Visión en sí no es una patología, sino el resultado de una de ellas, que provoca que la visión de quien la sufre no sea suficiente para desenvolverse con comodidad en la vida cotidiana. Por este motivo, la Baja Visión no tiene curación por sí misma, sino que habrá que atenerse a la causa que la ha hecho aparecer.
DMAE - Degeneración macular asociada a la edad
La degeneración macular asociada a la edad, o DMAE, es una enfermedad del ojo ocasionada por degeneración, daños o deterioro de la mácula. La mácula es una capa amarillenta de tejido sensible a la luz que se encuentra en la parte posterior del ojo, en el centro de la retina, esta área proporciona la agudeza visual que permite al ojo percibir detalles finos y pequeños. Cuando la mácula no funciona correctamente, las áreas del centro del campo visual empiezan a perder nitidez.
El tabaquismo, la edad avanzada, antecedentes familiares de DMAE, el alto nivel de colesterol en la sangre, la hipertensión arterial, entre otros, son factores influyentes. Recientes publicaciones por parte de un grupo de doctores barcelonenses han apuntado que la mutación del gen factor H podría ser la causa etiológica de la enfermedad, ya que según estos expertos “las personas que tiene la mutación de este gen poseen menos capacidad para controlar la inflamación causada por una infección cualquiera, que podría actuar como desencadenante de la enfermedad”. Las personas mayores son blancos frecuentes de la DMAE.
La degeneración macular ocasiona diferentes síntomas en cada persona. Puede que al comienzo de la enfermedad sea imperceptible, sobre todo cuando la degeneración se produce en un solo ojo mientras que el otro se mantiene sano por mucho tiempo. Una rápida pérdida de la visión central es síntoma frecuente de que la persona padece de degeneración macular en ambos ojos.
En la cotidianidad podemos encontrar indicios de este enfermedad, como: líneas rectas que se ven distorsionadas, ver palabras borrosas, problemas para detallar y áreas oscuras o vacías en el centro de la visión.
La seca o atrófica
Esta es el tipo de DMAE que más padecen las personas y se asocia con pequeños depósitos amarillos en la mácula. Presenta pérdida visual gradual y lenta. Si la DMAE seca afecta sólo a un ojo puede que los síntomas no sean notorios. Este tipo de degeneración macular no tiene ningún tratamiento eficaz y tan sólo puede frenarse su evolución para que no se pierda la visión por completo, evitando el tabaco, teniendo hábitos alimenticios saludables, ricos en antioxidantes y vitamina C.
La húmeda o exudativa
La DMAE húmeda es la menos común y la más agresiva de los tipos de DMAE. Se desarrolla con la formación de vasos sanguíneos anormales en la parte posterior del ojo y cuando estos empiezan a presentar fuga líquida; ocasionan distorsión en la retina. Una de las posibles causas de la DMAE húmeda es la falta de oxígeno en la retina, que provoca un proceso de angiogénesis. El tratamiento suele ser cirugía láser o, recientemente, el uso de fármacos antiangiogénicos inyectados directamente en el ojo, como Lucentis y Macugen, que aparte de frenar la enfermedad pueden aportar mejoría significativa en determinados casos. Ambos medicamentos bloquean un factor de crecimiento de vasos sanguíneos, la proteína VEGF que actúan a nivel molecular para modificar el curso de la enfermedad, frenando así su evolución.
Al aumentar la esperanza de vida en los países desarrollado cobra importancia la DMAE que es la causa de la ceguera en mayores de 65 años. Esta patología está directamente ligada con el envejecimiento y el deterioro del sistema ocular, y aunque la degeneración de las células fotorreceptoras no es la única causa es una de las más importantes.
El metabolismo de la retina consume muchos recursos y por lo tanto también crea muchos desechos que va eliminando, pero con la edad la capacidad de eliminar desechos va disminuyendo y estos se van acumulando produciéndose las drusas. El problema real es el lugar donde se acumulan las drusas que se van colocando entre las coroides y la retina separándolas. Como los fotorreceptores se nutren de los vasos de las coroides si las coroides se separan de la retina, de la membrana de Bruch en concreto, los conos y los bastones reciben menos irrigación sanguínea, y por lo tanto se degeneran. Si la zona afectada es la mácula, que es donde se acumulan la mayor parte de los fotorreceptores se pierde la visión central
CATARATAS
En medicina oftalmológica, se llama catarata a la opacificación total o parcial del cristalino. Existen fundamentalmente dos tipos:
* Catarata Congénita: producida por la existencia de una lesión hereditaria o una agresión sobre el embrión durante su desarrollo (p.e rubéola)
* Catarata Adquirida: es el tipo más frecuente y es la principal causa de pérdida de visión entre los mayores de 55 años. Está causada por la acumulación de células muertas en las lentes naturales de los ojos, encargadas de enfocar la luz y producir imágenes claras y nítidas.
Hay que señalar que las cataratas pueden ser operables. Sin embargo, existen casos en los que la situación médica del paciente desaconseja esta operación por diversos motivos, lo cual acarrea el problema de Baja Visión.
> Senil
> Traumática
> Diabética
> Por radiación
> Nuclear: núcleo de cristalino.
> Cortical: en la corteza.
> Polar anterior: en la parte central y anterior de la cápsula.
> Polar posterior: en la parte central y posterior de la cápsula.
RETINOSIS PIGMENTARIA
La retinosis pigmentaria es una enfermedad ocular de carácter degenerativo y hereditaria que produce una grave disminución de la capacidad visual, y que en muchos casos conduce a la ceguera. Aunque se nace con la enfermedad, ésta es raro que se manifieste antes de la adolescencia. La persona afectada no es consciente de su enfermedad hasta que esta se encuentra en fases avanzadas.
> Ceguera nocturna: deficiente adaptación a la oscuridad o lugares poco iluminados
> Campo de visión limitado como pérdida de visión periférica. Para poder ver los objetos circundantes hay que girar la cabeza. Es la llamada visión “en túnel”
> Deslumbramiento como molestias ante iluminación natural y artificial, haciéndose necesarias gafas con filtros especiales.
Es muy importante saber que no todas las Retinosis Pigmentarias son iguales ni conducen a la misma pérdida de visión. En España el número de afectados/as supera las 15.000 personas, estimándose en 60.000 las personas portadoras de los genes defectuosos y por tanto posibles transmisores de esta enfermedad.
RETINOPATÍA DIABÉTICA
La retinopatía diabética es una complicación ocular de la diabetes, causada por el deterioro de los vasos sanguíneos que irrigan la retina del fondo del ojo. El daño de los vasos sanguíneos de la retina puede tener como resultado que estos sufran una fuga de fluido o sangre. Cuando la sangre o líquido que sale de los vasos lesiona o forma tejidos fibrosos en la retina, la imagen enviada al cerebro se hace borrosa.
Es posible que en los inicios no se evidencien síntomas, dolor ni pérdida de la visión, pero en ocasiones puede producir edema macular, ya que una parte de la retina se hincha a causa del excesivo fluido, causando la visión borrosa y con manchas.
> Examen de agudeza visual.
> Retinografía.
> Examen de fondo de ojo con dilatación pupilar.
> Examen de angiografía retiniana.
Diversos estudios han demostrado que aun cuando la retinopatía diabética está avanzada un 90% puede mantener su visión, si siguen un tratamiento antes de que la retina se dañe severamente. El tratamiento para la retinopatía diabética puede necesitar cirugía con láser de argón.
MIOPÍA MAGNA
La miopía, del griego myops formado por myein (entrecerrar los ojos) y ops (ojo), es el estado refractivo del ojo inverso a la hipermetropía, en el que la imagen se forma por delante de la retina. Es un exceso de potencia de los medios transparentes del ojo con respecto a su longitud, por lo que los rayos luminosos procedentes de objetos situados a cierta distancia del ojo convergen hacia un punto anterior a la retina. Está considerada una ametropía.
Una persona con miopía tiene dificultades para enfocar bien los objetos distantes, lo que puede conducir también a dolores de cabeza, estrabismo, incomodidad visual e irritación del ojo.
La magnitud de la miopía se mide en dioptrías negativas. Cuando estas dioptrías son muy elevadas, nos encontramos con un caso de Miopía Magna, y un posible caso de Baja Visión..
GLAUCOMA
El glaucoma es una enfermedad del ojo que se define como una neuropatía degenerativa de las fibras del nervio óptico.
Puede ser agudo o crónico.
En el crónico hay una neuropatía óptica progresiva o una enfermedad del nervio óptico. Uno de los principales factores que pueden inducir a un glaucoma es una presión intraocular alta, aunque no hay ningún límite de presión ocular por encima del cual se desarrolle el glaucoma; mientras que una persona con una presión relativamente baja puede tener daños en el nervio óptico, otra con una presión ocular alta durante años puede no llegar a tener daños en toda su vida. Se ha comprobado que varios factores pueden desencadenar la apoptosis celular con pérdida de la estructura de sostén neuronal y posteriormente funcional del nervio óptico, por lo que la ceguera se presenta por áreas y “pixeles” del campo visual. Entre estos factores están el trauma repetido (cambios de presión intraocular), enfermedades de la microcirculación como Diabetes mellitus, hipotensión e hipertensión arterial, tabaquismo y drogas vasoconstrictoras, aunque puede presentarse como apoptosis neuronal espontánea con probable influencia de oncogenes y tendencia familiar. Un glaucoma sin tratar conduce a un daño irreversible del nervio óptico, con destrucción del mismo y con la consecuente pérdida del campo de visión, y puede convertirse en una ceguera parcial o total.
Las personas con un historial de glaucoma en su familia tienen un seis por ciento más de posibilidades de desarrollar glaucoma. Los diabéticos y las personas de color tienen más posibilidades de desarrollar glaucoma de ángulo abierto, mientras que los asiáticos tienen más opciones de desarrollar glaucoma de ángulo cerrado. En principio, todas las personas mayores de 25 años deberían hacer controles de glaucoma, aumentando los controles a lo largo de los años. La mitad de las personas que tiene glaucoma no lo sabe.
ANIRIDIA
Aniridia es una palabra de origen griego que significa “sin iris”. Esta enfermedad consiste en un trastorno global del ojo que conlleva a la falta parcial o total del iris. Se trata de una patología bilateral. La enfermedad fue descrita por Barratta en el año 1818 a la cual denominó irideremia haciendo referencia a su signo más aparente, la falta de iris. Entre los años 1980 y 1990 hubo gran confusión a cerca de qué gen producía la aniridia. En un principio, después de hacer algunos análisis como el mapeo, éste fue localizado en dos cromosomas diferentes, cromosoma 2 y cromosoma 11. El resultado final fue que el gen no está presente en el cromosoma 2 sino que únicamente se encuentra en el cromosoma 11. A esta conclusión se llegó después de un re-análisis de pacientes anirídicos.
La aniridia es poco frecuente, afecta a 180.000 individuos. Su origen es variable, pudiendo trasmitirse de forma hereditaria siguiendo un patrón de herencia autonómica dominante, o puede surgir de forma esporádica.
La aniridia provoca graves deslumbramientos, lo cual es un factor de gran incomodidad a la hora de salir a la calle o fijar la vista en puntos brillantes como la TV.
HEMIANOPSIA
Las hemianopsias es la pérdida de la mitad del campo visual. Puede ser: superior, inferior, homónima, heterónima